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Fecha de documento 26/07/2019 19:42:30
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Disyunción del mago Todos los efectos y objetos mágicos dentro del radio del conjuro, excepto aquellos que lleves encima o toques, se descomponen. Es decir, los conjuros y efectos sortílegos son deshechos y destruidos completamente (finalizando el efecto como haría un conjuro de disipar magia) y cada objeto mágico permanente debe superar una salvación de Voluntad o quedar convertido en un objeto normal mientras dure este conjuro. Un objeto en posesión de una criatura utiliza su propio bonificador a las salvaciones de Voluntad o el de su propietario, el que sea mayor. Si la salvación de un objeto mágico tiene un resultado de un 1 natural, el objeto es destruido en lugar de ser suprimido. También tienes un 1% de probabilidades por nivel de lanzador de destruir un campo antimagia. Si el campo antimagia sobrevive a la disyunción, ningún objeto en su interior queda descompuesto. También puedes usar este conjuro para afectar a un único objeto. El objeto recibe una salvación de Voluntad con un penalizador -5 para evitar su destrucción permanente. Incluso los artefactos están sujetos a la disyunción del mago, aunque sólo hay una probabilidad de un 1% por nivel de lanzador de afectar a esos poderosos objetos. Si tiene éxito, el poder del artefacto es deshecho y el artefacto es destruido (sin salvación). Si un artefacto es destruido, debes superar una salvación de Voluntad (CD 25) o perder permanentemente todas tus aptitudes de lanzamiento de conjuros. Estas aptitudes no pueden ser restauradas por magia mortal, ni siquiera milagro o deseo. Destruir artefactos es un asunto peligroso y hay un 95% de probabilidades de atraer la atención de un ser poderoso que tiene un interés o una conexión con el objeto. |